la 150

Los números redondos me gustan. No entiendo por qué me satisfacen. Esta es la entrada 150 de este blog. Un número tan estupendo como el 149, sin duda. Hoy lunes noto que empieza una nueva etapa, un número nuevo. Quedan apenas dos meses para acabar esta hermosa experiencia andaluza. 60 días parece todavía menos tiempo. Verbos y sustantivos ya casi olvidados me invaden de nuevo: desmontar, caja, empaquetar, nervios ... NO me gustan ni las rectas finales ni las despedidas: siempre pongo cara de idiota, o de tristeza mal disimulada, que es lo mismo con matices. Sin embargo el día me regala dos sorpresas:

UNO) He recibido en mi buzón (bueno, exactamente estaba en el suelo, porque el cartero como buen jinete de su moto de correos, lanza las cartas por la rendija de la puerta de entrada-todo sea dicho en su favor, inventada para tal fin- sin aperase de su caballo de hierro y como ésta no tiene caja receptora o amortiguadora, pues acaban en el suelo, en fin, cosas mías) el último libro del buen amigo Mario Cuenca: GUERRA DEL FIN DEL SUEÑO, que como dice en su dedicatoria es un libro de crisis para una época de crisis. Le he dado ya algunos mordiscos y sólo puedo deciros que hay un grandísimo poeta...bueno, esto ya lo sabía, después de sus anteriores libros, ya demas un gran novelista con su Boxeo sobre hielo. Lean a Mario, hagan el favor.

DOS) entro en el blog de los soperos y me encuentro con el bueno de mariano y sus entrañables posts. Qué grande eres! Sin duda un gran aliciente para el retorno.