domingo, 15 de junio de 2008

De lo andado a lo que perdura...

Ayer fue el día de decirles a mis adolescentes inquilinos habitantes del mundo, que me iba, o que les abandonaba, o que cada uno tiene un camino, vosotros ya sábeis, sí, me dicen moviendo la cabeza y no, escondiendo el corazón. Uno se levanta y me abraza, deseándome toda la suerte del mundo, intercambiando los papeles, como si fuera yo (que también) quien iniciara una vida ahora y no él quien tiene un interrogante, como Tántalo, sobre la cabeza, ahora somos iguales, bromeo, todos en el paro, me entienden, no hay reproches, parece que hablo con seis hombres y no con adolescentes sin infancia, amago de lluvia pero no llueve, uno imita un gesto de afecto, otro me dice que me echarán de menos, y éso es algo que parece simple pero no lo es, en absoluto, echar de menos es un lujo, porque significa que lo vivido juntos valió la pena, suben las acciones de lo andado, otro abre los ojos, como platos y la noticia le sorprende en un borrador en tiza donde esta opción no estaba. No dice nada. Calla. Su silencio me estrangula las tripas. Disimulo. Más explicaciones. La distancia siempre es una explicación. Hacemos cuentas de los días que nos quedan por vivir juntos y planeamos despedidas alegres. Hay tristezas ajenas que se agredecen egoístamente. Acabamos de ver la película y se van a dormir. Hoy la despedida es diferente. Hay demora en las buenas noches, abrazos cómplices: El que callaba desaparece del salón en silencio. Subo a su habitación. Le miro a los ojos. Le digo, emocionado, lo siento, que mierda. Abrazo. No dejes de andar.

7 comentarios:

soperos dijo...

ventura, leo del tirón todas las entradas de la ristra. emocionantes. todas. así que me quedo con cara de cebolla y voy a enganchar el carro de la compra a la bici, que he quedado para ir a recoger unos cachivaches para pintar. gracias por emocionarme, digo.

muás,
òscar.

soperos dijo...

...son las 7´15 de la tarde, y después de leer esas mismas entradas, voy al comentario y encuentro a mi bróder òsquítar aquí arriba. para no repetirme, puedo decir que a mi la emoción me pone cara de pepino.

(todavía tengo nítido en el disco C el día que me fuí de ahí después de casi 5 años. y de eso hace algo más de treinta.)

nos despedimos siempre para volver.

abrazo fuerte, ventura.

soperos dijo...

ah...es bueno el lapsus, soy un cualquiera -en el mejor sentido-.

pepe

Lucía.uy dijo...

.....recuerdo al jugador de futbolito que encontraste tirado en la calle, atravesado por un "fierrito"; y más que en el jugador, pienso en el "fierrito" que lo atraviesa.......pero también pienso, en esos muchos abrazos sanadores que te dan.

"alguna vez
alguna vez tal vez
me iré sin quedarme
me iré como quien se va"



Mis abrazos, Ventura!

Ventura Camacho dijo...

QUé bueno vuestros afectos y el acompañarme en esta despedida. gracias Òscar y Pepe, gracias Lucía, por esos preciosos versos que me encataron.

abrazos

eli dijo...

que momentito más chiquitito...
que sentimientos más enormes....
te estado viendo por un agujerito....
creo que te entiendo.
eli

Ventura Camacho dijo...

entender es otro de esos lujos...besos